Los principales navegadores de Internet, Google Chrome, Edge y Firefox, están próximos a alcanzar su actualización número 100. Sin embargo, estas nuevas versiones podrían comprometer su compatibilidad con gran número de páginas web, dejando a millones de usuarios sin acceso al ciberspacio.
Según admiten los desarrolladores, el cambio a la próxima versión de los navegadores —que estará disponible en marzo para Chrome y Edge, mientras que la de Firefox será lanzada en mayo— podría generar errores o problemas de compatibilidad en algunos sitios, al no estar preparados para leer cadenas de agentes de usuario de tres dígitos, de manera similar a lo ocurrido cuando, hace más de una década, los exploradores alcanzaron versiones de dos dígitos.