El Ministro de la Presidencia, Gustavo Montalvo, condenó la concentración de personas durante una actividad religiosa en la ciudad de Puerto Plata.
El también coordinador de la Comisión de Alto Nivel para la Prevención y Control del Coronavirus COVID-19, condenó la actividad multitudinaria celebrada hoy en Puerto Plata y recordó a las autoridades locales y a toda la población la prohibición expresa de realizar cualquier tipo de actividad que implique la aglomeración de personas así como la permanencia en las calles sin el debido distanciamiento social.
“Entendemos, por tanto, que es un acto de gravísima irresponsabilidad por parte de aquellas autoridades locales que no solo han permitido sino también incentivado la participación en esta actividad”, dijo el ministro en un discurso difundido este domingo.
Cuestionó que las autoridades policiales de la provincia adoptaran una actitud pasiva frente a lo que estaban ocurriendo, “Ante esto, el director de la Policía Nacional ha ordenado una exhaustiva investigación para determinar responsabilidades e imponer sanciones a quien corresponda”.
Señaló además que, en flagrante violación a los acuerdos alcanzados por el 911 con los gobiernos locales, ayer en Imbert y hoy en Puerto Plata se emplearon en las actividades realizadas ambulancias del 911, por lo que recordó que esas ambulancias fueron cedidas bajo contrato a los alcaldes por el Sistema Nacional de Emergencias y Seguridad para su uso exclusivamente en atención a emergencias .
“No permitiremos actuaciones unilaterales que vayan en contra del bien común y que pasen por alto las restricciones establecidas. El Gobierno actuará con rigor ante cualquier violación de las mismas”, advirtió.
Desafiando las normas del distanciamiento social, que buscan disminuir los contagios por el COVID-19, cientos de personas acompañaron al Peregrino de Villa Altagracia a llevar una cruz en la playa del malecón de esta ciudad, bajo un candente sol proclamando que a partir del lunes la enfermedad comenzará a desaparecer del país.
Hombres mujeres y niños levantaban sus manos y coreaban la canción “Paz en la tormenta”, que resonaba en una disco light que los acompañó hasta el último tramo del recorrido, unos 18 kilómetros aproximadamente desde Maimón hasta la playa conocida popularmente como la “Playa de Camacho, en la parte alta de esta ciudad.
FUENTE: Listín Diario